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jueves, 3 de enero de 2013

¡Mamá! ¿Por qué dejas el agua al Sol?!

¡Para que “charlen” un ratito, hija!... ¡a ver si anima el Agua!

Esto parecerá un “chiste”... pero el caso es que no lo es. Todo depende de lo que se entienda por “charlar”...


Ya sabemos que prácticamente somos agua...y luz...Como bien nos explica la Dra. Esther del Río:


“Los seres humanos estamos hechos de agua, sí, pero de un agua muy especial compuesta de cristales en forma de clatratos que permiten la luz y, por ende, la energía viaja a velocidades increíbles por nuestro organismo trasmitiendo información. Su pérdida es una de las principales causas de enfermedad por lo que su restitución permite recuperar la salud. En estado adulto aunque tomemos 4 litros de agua diariamente solo la tercer parte será la que las células puedan transformar y una vez transformada en cristal líquido podrá hacer todas las funciones arriba mencionadas, la demás se elimina por la orina sin ser utilizada, haciendo que las funciones de nuestros órganos se vean cada vez más disminuida sobreviniendo la vejez de nuestros tejidos y órganos. Recordemos que un 76% de nuestro cuerpo está constituido por agua si se trata de un individuo adulto y en un recién nacido la proporción es de 95%; esto nos hace suponer que a medida que envejecemos la pérdida de agua va siendo acelerada.”

...o ¿es que envejecemos porque la perdemos? Bueno, en cualquier caso, está claro que nuestra Vida es Agua y Luz.

Es evidente, pues, que el “contacto” Agua -Luz es importante. La polémica entra en juego con el concepto “comunicación”, esto es , “transmisión recíproca de información”. Esta “conexión informativa” incomoda a ciertas concepciones científicas “mecanicistas-materialistas”, pero el caso es que, la Ciencia, nos enseña que la “In-formación” tiene “formas” más sutiles que escapan a nuestro limitado “concepto humano” de “Comunicación”.

Esta visión mecanicista- materialista no sólo afecta a la ciencia ortodoxa, también se refleja en las consideraciones filosóficas más recientes sobre el Lenguaje humano. Al respecto, nos encontramos una crítica a la concepción semiótica de la comunicación lingüística (“Filosofía del Lenguaje”; Eduardo de Bustos Guadaño) en la que se trata de sustituir el modelo semiótico por “el modelo inferencial de la comunicación lingüística”... en fin no me voy a extender en este asunto porque sería “mi perdición” y la “del Bloc”, pero tan sólo voy extraer una de las conclusiones de esta crítica:

“Uno de los inconvenientes de la metáfora semiótica es que hace suponer que lo comunicado se encuentra de alguna forma contenido, encerrado, en la representación semántica de la expresión fonéticamente realizada (…) omite, precisamente lo que es la médula de la comunicación, el hecho de que la información no está dentro del mensaje, sino que, por decirlo así, el mensaje es la llave que da acceso a esa información”.



Esto quiere venir a decir que la “información no viaja dentro de los códigos sonoros”, es más, no existe en sí misma, todo se reduce a un “transmisor” y a un “receptor”... el mensaje es la llave de acceso a la información sólo a través de un receptor. Pero ¿qué son, en esencia, un “transmisor”,un “receptor” y la “Información”?

Si profundizamos, veamos pues, qué es lo que pasan por alto estas afirmaciones.

Cuando hablamos de los niveles últimos de la materia, nos encontramos que Energía y Materia se identifican (E=MC2 )...pues bien, esta Energía viaja (y nada lo hace más rápido que la Luz) y no sólo lo hace ella... también lo hace la In-formación (aunque, en realidad, no es que se mueva, sino que, en este nivel cuántico, no hay espacio-tiempo por medio). Por ello, esta In-formación trasciende, evidentemente, nuestros límites conceptuales de la palabra “Comunicación”...

Masaru Emoto, hizo un estudio muy interesante sobre cómo “las palabras” inciden en la estructura del Agua. Esta investigación (que recomiendo por interesante) no tiene el beneplácito de la Ciencia, pero, el caso, es que no me parecen nada descabelladas sus conclusiones... al contrario, si nos interesamos algo en “Física profunda” tienen mucha coherencia.

Desde mi opinión personal, lo que debería puntualizar la investigación de Emoto es que no son en sí “las palabras o el pensamiento” las que inciden en el “agua”... sino su “contenido energético”, es decir, “las emociones que encierran” y “las frecuencias que emiten”...y con ellas, en un nivel a-energético, “una In-formación sutil” que “el materialismo” pasa por alto.

Veamos pues que dice Ervin Lazlo en su investigación (“El Universo In-Formado”) que también recomiendo por interesante:

“Lo que no es la in-formación: La “teoría de la in-formación” no es lo mismo que la “teoría de la información” porque in-formación no es información en ninguna de las definiciones científicas o cotidianas. Tampoco es el conocimiento obtenido acerca de un determinado acto o suceso, ni un patrón impuesto en un canal de transmisión, ni siquiera la reducción de incertidumbre con relación a múltiples posibilidades. La información en el sentido de conocimiento sobre cosas y sucesos puede ser transmitida por la In-formación, pero la propia In-formación es diferente de la información en sus definiciones habituales.”



“Lo que es la In-formación: La in-formación es una conexión sutil, casi instantánea, no evanescente y no energética entre cosas situadas en ubicaciones diferentes en el espacio y entre sucesos que ocurren en diferentes momentos del tiempo. Dichas conexiones se denominan “no locales” en las ciencia naturales y “trans-personales” en la investigación de la Conciencia. La in-formación vincula los objetos (partículas, átomos, moléculas, organismos, sistemas ecológicos, sistemas solares, galaxias enteras, además de la mente y la conciencia asociadas con algunos de estos sistemas) con independencia de la distancia a la que estén separados unos de otros y de cuánto tiempo haga que se crearon las conexiones entre ellos”.

Bien... si alguien no creía en los “objetos encantados”... aquí hay una muy buena explicación. La In-formación de las Emociones que causan los Sucesos no es evanescente ... permanece para siempre vinculada mientras exista el objeto. Es como si el “Vacío-cuántico” fuera una inmensa “Red de grabadora de Ondas”... eso es lo que viene a decir Laslo con su Universo In-formado... se trata “del campo A” o “Akasha”...vaya... parece ser que a lo que se reduce todo no es a otra cosa que,  precisamente... la In-formación.

Pero sigamos con Ciencia y con el Agua... esta compilación sobre investigaciones respecto a la estructura del agua y su comportamiento, la he extraído de esta Web;

Una aproximación desde la perspectiva científica. Ana Hervás Hermida,Mª Asunción Molina Casino. E.T.S. DE INGENIEROS AGRÓNOMOSUNIVERSIDAD POLITÉCNICA DE MADRID
Departamento de Química y Análisis Agrícola


Modificación de la estructura interna del agua
Varios de los sistemas de activación o vitalización del agua basan su acción en la modificación de la estructura interna del agua. La aparente sencillez de la molécula de agua, compuesta por dos átomos de hidrógeno unidos a un átomo de oxígeno, conlleva, sin embargo, un comportamiento bastante complejo.


Los intentos de explicar las llamadas “propiedades anómalas” del agua han dado lugar a que se hayan desarrollado numerosos modelos sobre su estructura (Wallqvist y Mountain,1999). Muchas de estas hipótesis consideran la existencia de diferentes agrupaciones de moléculas de agua llamadas “clusters”. La primera referencia que se recoge sobre su posible existencia se debe a Whiting (1884) y a lo largo del siglo pasado se han propuesto otras teorías como las de Bernal y Fowler (1933), Pauling (1959), Boutron y Alben (1975) o la de Dougherty y Howard (1998). Más recientemente, Chaplin (2000) propuso un modelo de estructura, que pudo observarse mediante difracción de rayos X (Muller et al, 2003), que comporta la existencia de pequeños clusters de cuatro moléculas que pueden unirse para formar agrupaciones más complejas, de geometría icosaédrica. Hay evidencias, por tanto, de que las moléculas de agua, unidas mediante puentes de hidrógeno, forman una infinita red en la que se dan agrupamientos o “clusters” localizados y estructurados. De alguna manera, el agua presenta cierto orden o estructura entre sus moléculas. Algunos de los sistemas de activación o vitalización se supone que actúan produciendo un cambio en la estructura del agua, bien a nivel molecular o al nivel de la estructura de los clusters.
Otra de las propiedades del agua en la que supuestamente se basan algunos de los sistemas de activación o vitalización es la capacidad de recibir, portar y transmitir información. Este controvertido tema está muy relacionado con la cuestión de las “diluciones homeopáticas”. La homeopatía es una terapia que implica aceptar que en disoluciones llevadas más allá del límite posible de conservación de los átomos, iones o moléculas del soluto sometido a dilución, persisten algunas de las propiedades de éste de manera efectiva. A este fenómeno Benveniste et al. (1988) lo llamó “memoria del agua”. Su trabajo publicado en la revista Nature se presentó como una prueba de la efectividad de estas diluciones homeopáticas. La posibilidad de este hecho supone tal cambio de paradigma que la respuesta de gran parte de la comunidad científica fue la del escepticismo y el intento de ridiculizar al representante de los equipos de investigación. A pesar de ello, éste continuó sus investigaciones aportando una hipótesis sobre los mecanismos de interacción entre moléculas en los sistemas biológicos que puede dar una explicación a dicho fenómeno. Según Benveniste, cada molécula emite una señal electromagnética que es captada por co-resonancia por su correspondiente receptor.
Esta señal permanece activa a pesar de la ausencia de moléculas que se da en las diluciones homeopáticas. Esta presencia de frecuencias electromagnéticas en el agua ha sido estudiada por la italiana Enza Ciccolo (2001), quien ha estudiado las aguas llamadas milagrosas como la de Lourdes y el espectro de vibración que presentan. Aunque no existe a día de hoy una hipótesis aceptada sobre el fenómeno de la homeopatía, las investigaciones que se están llevando a cabo apuntan a que las propiedades fisico-químicas de las diluciones homeopáticas son diferentes de las estudiadas en el agua sola (Elia et al, 2004) y (Lo, 1996).


Por otro lado, Rey (2003) mostró mediante el estudio de la termoluminiscencia que la estructura de los puentes de hidrógeno en el agua pura es diferente de la que podía esperarse en una solución altamente diluída más allá del número de Avogadro.
Existen otros trabajos en los que se recogen estas nuevas aproximaciones al estudio del agua, como los de Ansaloni et al.(1991) y Bige et al.(1991), entre otros. Uno de los trabajos que está teniendo un gran eco a nivel social, relacionado con estas cuestiones y no presentado desde un ámbito estrictamente científico, es el del japonés Masaru Emoto.

Este investigador ha puesto a punto una técnica para obtener imágenes de cristales de hielo microscópicos que han sido publicadas primero en japonés y rápidamente traducidos a otros muchos idiomas.

De la observación de estas imágenes presentadas en sus libros, “Messages from Water, vol.I y 2”, el primero publicado en español en el año 2003 con el título “Mensajes del agua”, puede extraerse que el agua modifica su estructura o comportamiento dependiendo de diversos factores; entre ellos, la contaminación, imágenes, sonidos o pensamientos. Según el trabajo de Emoto, el agua es especialmente sensible a las energías de su entorno.”



Bueno... en última instancia, esto nos recuerda que la Conciencia, qué más da cuál sea su manifestación física (el pensamiento, las emociones, las palabras...), y sus objetos “no están del todo separados” de alguna sutil forma... de modo que nuestro “Ánimo”, que es la manifestación de nuestro Sol (Corazón), bien pudiera también “hablarle” al Agua... como lo hace el mismo “Sol”...¿por qué no?
 
Os transcribo algunos apuntes de una entrevista muy interesante de Eduard Punset a Deepak Chopra (médico y filósofo) sobre el poder de la mente,  incluida en su libro “Cara a cara con la vida, la Mente y el Universo”. Aquí se describe muy bien qué es “eso de vivir dentro de la dinámica de la Enfermedad”, cosa habitual en nuestros días:

Eduard Punset: Has dicho en en lugar de crear conscientemente enfermedadades deberíamos concentrarnos en cultivar la salud. ¿A qué te refieres exactamente?

Deepak Chopra: Mi idea es que centrarse en algo conlleva volverlo más sólido. Si quieres enriquecerte, no debes profundizar en la pobreza ni sus mecanismos. Si quieres mejorar tu salud, no debes pensar en la enfermedad ni sus mecanismos. En la facultad de medicina se estudia mucho la enfermedad, pero no la salud. La salud es la ausencia de enfermedad, un estado de felicidad, creatividad, vivacidad, vitalidad... Bienestar físico, emocional y espiritual, en suma.
(…) el cuerpo humano ha evolucionado durante millones de años y ha desarrollado procesos internos de curación. Si duermes en el suelo y te hieres, no mueres desangrado porque tu cuerpo inicia un proceso de coagulación que detiene la hemorragia. Si coges una infección, tu organismo sintetiza inmediatamente un anticuerpo con efecto preciso sobre esa infección en particular. Si nunca has estado expuesto a neumococos pero tu abuelo sí, las células inmunitarias de tu organismo recuerdan cómo combatir los gérmenes. El cuerpo humano es la mejor farmacia que pueda existir: sintetiza tranquilizantes, sustancias para dormir, anticuerpos, células inmunitarias, fármacos contra el cáncer y antiinflamatorios. Si surge una necesidad, el cuerpo lleva a cabo la síntesis correcta, en el momento correcto, para un órgano concreto y sin efectos secundarios.

(…) los modelos médicos se basan en una percepción newtoniana del mundo y representan un modelo mecanicista, materialista. Es decir que se considera que el cuerpo humano es básicamente anatómico y, por tanto, conociendo su funcionamiento se puede explicar todo, sea poesía, música, arte o ciencia, porque todo proviene de las moléculas. Y es una superstición, porque el cuerpo humano no es atómico en absoluto, sino una mezcla de moléculas, energía e información. Y desde la perspectiva de la física, el cuerpo está formado por átomos con toda su información, porque las moléculas que constituyen el cuerpo están formadas por átomos y los átomos contienen niveles de información y energía. Casi se podría decir que los pensamientos son nubes de fotones. Si pudieras observar tu mente mientras piensas, vería nubes de fotones con bandas de información moduladas por frecuencias, como las emisoras de radio FM. Y como consecuencia de estos componentes neuroquímicos, al pensar convertimos la información en energía y materia.

(…) la fisiología, el sistema autoinmune, el sistema nervioso, el endocrino e incluso la conducta están influenciados por el estado de conciencia. Si se tiene un estado de conciencia temeroso, el nivel de inmunidad será más bajo, no funcionará bien. Por el contrario, se ha demostrado que las células inmunitarias producirán tranquilizantes similares a los medicamentos que tomamos si se está tranquilo. La diferencia es que permite a las células inmunitarias que hagan su trabajo tranquilamente, y la molécula sólo va a donde se genera el impulso.

E.P. ¿Se parece, entonces, esta teoría y la voluntad de la calle de pensar positivamente para sentirse bien?

D.C. No se puede comparar porque pensar positivamente puede ser una impostura muy artificiosa. Pensar es un proceso instantáneo, como respirar. Querer tener pensamientos positivos y evitar los negativos hace que los negativos se vuelvan más intensos, y se acumula mucho estrés. Es decir, la voluntad de pensar sólo en positivo es muy estresante. Es necesario no pensar en todo a la vez y crear un estado de tranquilidad vital y de calma interior. Si el cuerpo y la mente están calmados, la inteligencia interior surge del cuerpo espontáneamente. Es muy sorprendente, teniendo en cuenta que la inteligencia interior está codificada en dos simples tiras de ADN. Esta inteligencia se refleja en las células del corazón, del riñón, del cerebro y del ojo. De hecho, toda la poesía, la arquitectura y la música que se ha creado no tienen nada que ver con el hecho de pensar positivamente, sino que son fruto del flujo espontáneo de energía, información e inteligencia, porque la información que se nutre a través de sí misma no es una información muerta, sino viva. Así que la información viva o la inteligencia evoca espontáneamente las llamadas morfogenésis y diferenciación. Probablemente existe un nivel que está más allá de los campos electromagnéticos que todavía no se ha demostrado (¿o ya sí?)*. Pero incluso desde la perspectiva de los campos electromagnéticos, los pensamientos son agrupaciones de fotones. Cada experiencia subjetiva tiene su correspondiente campo electromagnético fluctuante, asociado al mismo y, literalmente, conforman bloques de información. Mis pensamientos no están fuera del campo, sino dentro de él.”
*La cursiva es nota mía.
En fin, parece que nos encontramos aquí una misma “In-formación” subyacente... un consejo personal pues... si cocinas, ¡anímate! Hazlo con Conciencia y Cariño... como siempre digo... ¡se nota!... y respecto al Agua... pues parece tener un alto nivel de propiedad “mimética” que puedes utilizar a tu favor! ¡ Tienes muchos "Soles" a tu disposición!

Feliz Instante!

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